Ginjol Gastrobar

La primera impresión muy decepcionante ya que cuando llegamos a cenar, a las 22h, el restaurante estaba vacío. A lo largo de la velada, un sábado por la noche, solo se ocuparon 3 mesas. En cuanto a la comida, pretende ser original pero se queda en comible, en particular el carpaccio d'esgarraet que no se lo recomiendo a nadie! Nos lo comimos por vergüenza ajena. Además, la carta muy pobre. Lo mejor las pizzas con una masa buena aúnque la guarnición carece de sentido y harmonia.

Cocina creativa y relación calidad precio excelente

Tapas muy elaboradas. Son muy pequeñas pero baratas. Así puedes probarlas todas. Especial atención para los que pedecen alguna intolerancia pues tienen tapas para celíacos o para los que padecen intolerancia a la lactosa así como para veganos. Sin duda la atención del personal magnífica. Sin duda repetiria

Comida muy rica y moderna, tapas muy originales y diferentes a lo habitual. Lugar muy recomendado, repetiremos seguro.